Cuaderno de viaje (I)

18 junio 2007

Mar y frontera, originally uploaded by Atzimba.

Me doy un tiempo, éste nos quedó libre entre las labores de mis anfitriones y la hora de la comida. Se supone que en vacacioes no debería uno estar frente a la compu, pero quiero compartir.

Las vacaciones empiezan desde el momento en que confirmas tu partida, el destino, el día, la hora. Continúa con la salida y el día esperado llegó. Todo el sábado fue de transportes varios y diversos: pesero, camión, coche, otro cohce, camión a Toluca, avión.

El viaje es un poco pesado, son tres horas de viaje pero por la diferencia de horario de dos horas resulta en que llegas sólo una hora después de la que partiste. Más pesado de hace si una nena gritona y molesta les hace la vida difícil a sus padres y al resto de los pasajeros del avión. Pero no fue tan molesto a pesar de todo, mi elección del lugar en el avión fue muy buena, la ventanilla un poco adelante del ala izquierda del avión me permitió contemplar en principo una montaña alta rodeada de nubes en su parte baja, el atardecer prolongado, la luna, los primeros luceros de la tarde, los poblados y sus luces. Creí que con tanto tiempo de no viajar y no volar me habría olvidado de la sensación, pero no, en verdad recodaba el gusanito que se siente cuando el avión se eleva, cuando ves que las cosas van quedando debajo y se van viendo pequeñas pequeñas. Lo recordaba y lo volví a disfrutar.

La llegada fue un poco cansada, desde ese momento tenía ya compromisos y acompañé a mi tío a una reunión de disfraces, a la que por supuesto, no iba propiamente ataviada. La reunión fue muy interesante, algo de tipo intelectual con personas de varias nacionalidades, si hubiera ido un poco menos cansada y descontrolada la hubiera disfrutado más.

Ayer domingo me propusieron tres opciones: carreras de galgos en el hipódromo, Centro Cultural Tijuana con actividades propias de un espacio de cultura o ir a las Playas de Tijuana. La fotografía muestra mi elección.

También hacía mucho tiempo que no veía el mar, pero cuando llegué recordé que tenía el mismo tiempo de no oir el mar, de no oler el mar, de no sentir la brisa del mar... (eso sí, no probé el mar). Caminé al lado de la playa sin prisa, sin preocupaciones tal como les prometí a todos que trataría de estar en mis vacaciones.

Hoy cambiaré de anfitrión, la futura esposa me dará alojo y las actividades serán distintas. La hora de la comida se acerca y yo voy a seguir vacacionando.

P.D. cuenta la leyenda... llevo una piedra del mar...

4 comentarios:

::júbilo::haku:: dijo...

pasela bien!

Adrianza dijo...

Que maravilloso es saber como alguien disfruta de las maravillas con tanta sencillez, felices vacaciones

Taker dijo...

Pues que bien que todo va bien, disfruta las vacaciones.

Por cierto ¿que pasara de regreso cuando llegues 5 horas despues de hab ber salido? :D

Saludos!!

Ilhuicatl dijo...

ohhh si,Adriana, yo no se si pudira disfrutar del mar como tu, ya que me cautivan mas las montañas, la nieve, pero por lo que escribes me diero ganas de estar frnte, mirando lo que tu viste, no lo se, la vsita es maravilloso...y gracias a ella te puedo leer.
http://audreykanbel.blogspot.com/